jueves, 12 de enero de 2012

Elegir el destino de la Luna de Miel

Es curioso que entre mis más cercanos amigos, cuando anunciamos que nos casábamos, la pregunta más repetida era:
y sabéis a dónde iréis de luna de miel?
Supongo que esto es porque soy agente de viajes, y pensarían que me iba a sacar un megaviaje de la manga. Pues empecé a mirar opciones prácticamente al día siguiente de la proposición. Os contaré las opciones por las que fuimos pasando y las razones por las que acabamos descartándolas:
  • Costa Este de Estados Unidos. Me planteé el vuelo directo con Iberia a Los Ángeles, y a partir de ahí, alquiler de coche y a hacer kilómetros. En los planes estaba visitar Los Ángeles, San Francisco, Las Vegas, y todo lo que estuviera a nuestro paso, incluyendo parques naturales, que con un Ingeniero de Montes de los que no llevan camisa, pues no podían faltar.
Finalmente lo descartamos por 2 razones: Yo no conduzco, y aquí el Ingeniero tendría que chuparse kilómetros y kilómetros el solito. Y por otro lado, parece una paliza de viaje de allá para acá, y yo siempre me he planteado la luna de miel como un viaje para no hacer ni el huevo, o por lo menos que haya una parte cultural, y luego una de relax a tope.
  • Maldivas. Parece un paraíso alucinante, pero demasiado relax. Allí no hay nada que hacer, si vas a un hotel que de verdad merezca la pena es de esas cabañitas sobre el agua, en la isla en la que estás sólo está el hotel, y quizá dé cierta sensación de claustrofobia porque son islas pequeñas, que te puedes recorrer fácilmente andando. Además, rara vez se hace el viaje sólo a Maldivas. Suele ir acompañado de Sri Lanka o India. Y esos son sitios que me apetece conocer, sí, pero en otra ocasión. No nos engañemos, se nos iba de presupuesto.
  • Bali. Encontré unas estupendas tarifas de agente tanto en vuelos como en alojamiento (no llegué a comprobar que en las fechas que nos interesaban estuvieran disponibles esas tarifas), pero nos echaban para atrás tantísimas horas de vuelo. Cuando hemos cruzado el charco ya nos parecieron suficientes las 10 horas de vuelo a Cancún. Y luego encima con jet lag...
Y finalmente llegamos a la opción ganadora. Llegamos a la conclusión común de que nos apetecía de nuevo ir a playas paradisiacas, pero a la vez asequibles para nuestros pequeñitos bolsillos. Nosotros conocemos ya Jamaica, Cuba y Riviera Maya. Así que nos faltaba Punta Cana. Pero aun así, 7 días de luna de miel nos parecía poco. Pero 7 días en Punta Cana demasiado. Así que decidimos complementarlo con algo cultural y más o menos próximo: Nueva York!!! Cierto es que yo ya he estado, pero las 2 veces que he ido han sido sin Mr. Argu, y todo el tiempo durante esos viajes pensaba en él. En lo muchísimo que le gustarían las cosas que yo estaba viendo. Así que tarde o temprano tenía que volver allí con él de la mano. Al contárselo a algunos amigos hemos tenido la sensación de que no les parecía suficientemente especial. Pero os diré una cosa: es nuestra luna de miel, nuestro primer viaje de casados. Nosotros disfrutamos de los viajes, sean donde sean, porque no importa tanto el sitio como la actitud con la que vayas. Y los billetes ya están emitidos y las reservas de hotel hechas, así que...

2 comentarios:

  1. Acertadísima decisión la de NY, sin duda. Fíjate que me echa un poco para atrás lo de Punta Cana, lo veo demasiado...típico, quizá.

    Pero lo de NY...le va a encantar :-D

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  2. Ayyyyy....New York de mis entrañas.... que envidia leches!!! .. y luego al torre, pues muy bien ... solo veo un problemilla, la caló que debe hacer en esas fechas en ambos destinos ... pero habiendo amor del bueno, que importan unos cuantos gradillos celsius ??? .. seguro que lo vais a disfrutar ...

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