jueves, 12 de enero de 2012

Sobre los fotógrafos

Un profano en este tema, o más bien, un hombre, podría pensar que lo del fotógrafo en una boda es bastante prescindible. Pero si ya en un viaje necesito ver las fotos que hice para recordar muchas cosas, por muy inolvidable que vaya a ser el día de nuestra boda, también habrá detalles que se me olviden, y para eso está el fotógrafo. En mi opinión esa es la misión que voy a encomendarle. Que fotografíe momentos. No quiero las típicas fotos de familia, posando y que no me recuerden a nada en especial. Quiero que me "pille" hablando o riendo con mis amigos, abrazando a mis padres, en una mirada cómplice a mi ya marido... Nada de organizar una cola con los invitados y los novios posando quince mil veces. Las únicas fotos posadas que quiero son las de nosotros 2 solos después de la ceremonia, y aun así, quiero que sean todo lo naturales posible. Y esto no es sencillo. Al menos es lo que he pensado mientras buscábamos fotógrafo para nuestro día. Muchos caen en el posado fácil, en colocar a los grupos bien ordenaditos, los altos atrás, los bajitos delante, y los que no quepan a los lados, que se agachen en el centro. Afortunadamente, después de mucho buscar, encontramos alguien que hace exactamente eso que estamos buscando. De hecho hemos encontrado varias empresas, y los hay muy buenos, pero no baratos... Sólo por hacer el álbum te clavan cerca de 300 euros por lo menos. No estoy dispuesta. Pero se hizo la luz, y gracias a una de las múltiples webs que existen que promocionan diferentes proveedores necesarios para cualquier celebración, en este caso www.bodasturias.com, pues dimos con lo que buscábamos. Ahora ya sólo falta que nos saquen guapos... Pero cómo un amigo siempre dice, será fácil porque:
lo hemos vuelto a conseguir, somos los más guapos de todos

1 comentario: